Ver amanecer a veces tiene sus cosas buenas…
O no. He llegado a la oficina con dos cortes en una mano, pero no me he dado cuenta hasta que me he sentado y he puesto las manos sobre el teclado. Tiene su explicación.
Si hay algo que me apasiona son los días que me quedo en Madrid a dormir y luego tengo que ir en metro. Es una maravilla. Qué tranquilidad. Qué paz se respira a las 7:30 en esos túneles.
Pero todavía mejor que moverte en hora punta, es la llegada a Alcobendas, donde hay tornos para salir, y como no te pase el ticket y no haya nadie para ayudarte ahí te quedas. Y así estaba yo, con mi maletita y cara de sueño delante de unas vallas estupendas. Lancé la maleta al otro lado y utilicé una técnica de salto, que no revelaré, para pasar yo. Fuck the police.
Fuera de todo pronóstico, he llegado viva a la 4ª semana. Y no solo eso, me he acostumbrado: me levanto a las 6 como quien se levanta a las 10. La semana pasada fue una pequeña cuesta abajo para coger carrerilla y arrancar mejor en la siguiente.
Ya puedo decir que he aprendido algo más que adjuntar siempre los documentos en los correos. Rescato la autoevaluación de la 2ª semana:
- Preguntar todas las dudas.
- Mejorar la organización.
- Tener paciencia al esperar respuestas/encontrar la información/etc.
- Dificultad al arrancar a escribir y lentitud buscando recursos gráficos.
- Fijarse en cosas: leer mejor los correos, revisar lo que envío (y si lo adjunto).
Esta lista ha quedado (bastante) superada. Más adelante se sumaban las tareas de socializar y comerme la fruta. Sigo trabajando en ello.
Cuando mejoras en algo siempre aparecen nuevas cuestiones a mejorar. Pasa con todo y en eso se basa la capacidad de avanzar. Para mí:
- Hacer las cosas más sencillas: el fin justifica los medios. No dar veinte vueltas si puedo dar una.
- Aunque suene un poco contradictorio con lo anterior… Dar más vueltas a las correcciones que me mandan hacer y dedicar unos minutos a pensar bien.
La actitud y las ganas siguen intactas, aunque hayan podido decaer algún día, lo importante es que no desaparezcan.
Muy filosófico todo. Fin.